Después de ver el hombre de acero y escribir mi critica me quedé pensando de forma apocalíptica en lo mediocre que se a vuelto el cine en parte por ponerse al servicio de la política barata. Estos pensamientos se repetían una y otra vez en mi cabeza como la sala de los picapiedras sumiéndome en una depresión y pensamientos fatalistas cuando de repente recordé que no he escrito sobre la película Django.
Inmediatamente se sintió como un respiro de aire fresco y una sonrisa ilumino mi rostro. Y con mi corazon lleno de renovada esperanza la s ideas empezaron a fluir como nunca.
Pero antes de hablar de Django hablaré un poco de lo que opino de Tarantino.
Cuando pienso en Tarantino no puedo evitar pensar en un hombre ignorante y con una visión muy ingenua o quizás nula sobre el mundo, de ahí me parece natural que existan personas que no solo no les gustan las pelícuas de Tarantino mas bien las detestan.
Es claro que películas como Kill Bill o Pulp Fiction no tienen nada positivo que enseñar y peor aun ni siquiera representan algo mas que un entretenimiento. El mismo Tarantino ha dicho que le sorprende ganar premios porque sus películas no son el tipo de películas que unen a las personas mas bien son el tipo de películas que las separan.
Entonces no dejo de preguntarme ¿por que me gustan tanto sus películas? Simplemente porque sus películas tienden a ser impredecibles, ningún personaje resulta imprescindible, nada se reduce a salir bien o mal y sabe escoger la música adecuada para que cada escena tenga el impacto correcto.
También esta la "originalidad" es gracioso que pocos de sus trabajos sean totalmente originales, muchos son una mezcolanza de muchas películas anteriores pero cuenta las historias de una forma mas moderna y profunda, entonces te sientes como si estuvieras viendo una película de los 80 con una trama de los 50 o 90.
Lo cual me recuerda lo que Tarantino dijo alguna vez: si te gustan las películas puedes hacer una buena.
Lo que me lleva a Django.
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